Artroplastia de cadera

Artroplastia de cadera

La articulación de la cadera dañada dificulta el movimiento y es una causa grave de discapacidad y dolor insoportable. Su reemplazo por una prótesis es uno de los mayores logros modernos de la cirugía ortopédica y la medicina en general. Permite a pacientes que de otro modo estarían condenados a una discapacidad permanente y dolorosa en cama, caminar sin dolor y ser capaces de valerse por sí mismos.

- ¿Qué es la artroplastia de cadera?

Se trata de una técnica quirúrgica pionera denominada AMIS (cirugía mínimamente invasiva anterior) y supone un paso adelante en el campo de las artroplastias totales articulares ya exitosas.

La cirugía de reemplazo total de cadera tiene como objetivo reemplazar el hueso y el cartílago dañados de la articulación con componentes plásticos o cerámicos y metálicos. Una prótesis de cadera es una articulación artificial compuesta por un vástago femoral con una cabeza (esfera) y una copa acetabular (apófisis esférica).

El reemplazo total de cadera alivia el dolor en el 90 al 95 % de los pacientes. Le permitirá realizar sus actividades cotidianas sin problemas.

- Recuperación

La duración de la hospitalización varía, pero puede oscilar entre 3 y 10 días. Tras el alta, se requiere fisioterapia y ejercicios diarios.

Los ejercicios de fisioterapia son importantes después de un reemplazo total de cadera, y una recuperación fluida suele depender de que el paciente siga el programa de ejercicios postoperatorio prescrito. En general, la recuperación es bastante rápida; sin embargo, en algunos casos, el paciente necesita inicialmente muletas o un andador y luego un bastón durante unos meses.